Fuera del casco antiguo de nuestra ciudad y adentrado ya en la zona comercial, tenemos otra joya de gran valor que suele pasar desapercibida para el turista debido precisamente a su situación. Nos referimos al Palacio de los Busianos, una de las más lujosas arquitecturas privadas de la ciudad.
El edificio debe su existencia al aristócrata Diego López Messía, caballero de la Orden de Santiago. Su construcción la podemos situar en torno al 1581. Su portada es de dos cuerpos y presenta en su parte izquierda una torre inconclusa. Consta de dos pisos de igual simetría, en el primero tenemos la portada de acceso al patio. En el segundo piso tenemos cinco balcones que se corresponden con los vanos del cuerpo inferior ornamentados con pilastras jónicas pareadas y coronados por pesados frontones sobre voladas ménsulas. Son de destacar las máscaras indianas situadas en el frontón del balcón central de la última planta de las que se conocen muy pocos datos pero que dan una gran originalidad al edificio siendo estos ornamentos únicos en la provincia. También tenemos que destacar su torre inacabada en la parte izquierda del edificio seguramente por falta de presupuesto. El palacio está organizado en su interior por un gran patio central con doble arquería imitando al modelo Vandelviriano del patio del Hospital de Santiago. Destaca la gran escalera de doble tramo, la más opulenta y grande de los palacios de la ciudad, al igual que su bóveda de media naranja decorada con frescos nobiliarios. En el siglo XIX el edificio pasó a manos de los Busianos a través de Doña Manuela de Orozco y Bernuy ( Marquesa de Busianos) y tras varias generaciones en sus manos fue vendido a Don Ricardo Solá.
En la actualidad su propietario es Don Miguel Blanco Martínez. Como curiosidad, el actual titular del marquesado de Busianos es Don Gaspar Saro Domingo que accedió al título en el año 2022. La historia de este palacio está llena de dudas, desde la probable fecha del inicio de su construcción, pasando por las teorías sobre las máscaras indianas (es posible que fueran copiadas de otras o también es posible que fueran traídas de las Américas) y terminando con las generaciones de Busianos que vivieron en el edificio en algún momento de su vida ya que no se sabe a ciencia cierta cuántos fueron. Lo que sí es cierto es que estamos ante un edificio único en su construcción y ornamentación siendo el gran desconocido de la arquitectura palaciega de Úbeda.